El círculo de estudio es un programa dirigido a jóvenes y adultos. Los cursos impartidos, generalmente, una vez por semana por un tutor basan su contenido y orden en una serie de actos de servicio, que crea en los individuos la capacidad de responder a las exigencias de comunidades vibrantes.
Tal capacidad se aprecia en términos de «caminar por un sendero de servicio». En dicho sendero se les ayuda a las personas primero, a realizar trabajos relativamente sencillos, y después, a llevar a cabo actos de servicio más complejos y exigentes.
Esta es la naturaleza de la construcción de capacidad. Alguien que está ahí para acompañarle mientras aprende a caminar el sendero por sí mismo. El enfoque pedagógico se relaciona exclusivamente con las formas en que se puede ayudar a las personas a aumentar su capacidad para servir.
Entre las actividades que llevan a cabo se encuentran las reuniones devocionales, las clases de educación espiritual para niños, los grupos prejuveniles, así como también el inicio de sus propios círculos de estudio para compartir con otros la dicha del servicio a los demás.